Investigadores del grupo que lidera Jaume Marrugat en el IMIM de Barcelona (grupo REGICOR) y del grupo de Antonio Bayés en el Instituto de Investigacion Germans Trias i Pujol han sido reconocidos por varios de sus recientes trabajos en el ámbito cardiovascular.
Uno de los premios a las mejores comunicaciones presentadas en el 30 Congreso de la Societat Catalana de Cardiología ha recaído en el trabajo titulado "Papel de la extensión de la enfermedad cardiovascular y del nivel de colesterol en las recurrencias de los pacientes con enfermedad cardiovascular establecida" de los autores: Marrugat J, Ramos R, Garcia-Gil M, Zamora A, Comas-Cufi M, Frances A, Garcia-Elías A, Román Dégano I.
El Congreso se celebró los pasados 31 de mayo al 1 de junio en la Universidad de Barcelona y contó con la participación de más de 1000 especialistas.
La Sociedad Española de Arteriosclerosis y el Comité organizador del su Congreso Nacional, premiaron, asimismo, por su calidad científica a la comunicación “Análisis de LRP1 soluble como biomarcador de riesgo coronario: asociación con acontecimientos clínicos y capacidad de predicción" de Ángela Vea, Isaac Subirana, David de Gonzalo, Jaume Marrugat, Roberto Elosua, Irene Roman y Vicenta Llorente. La comunicación ha recibido el premio Atención Primaria-Epidemiología 2018.
Un estudio colaborativo del CIBERCV realizado en una subcohorte de REGICOR
Tal y como explica la investigadora del CIBERCV Vicenta Llorente, “la evaluación del riesgo cardiovascular está basada exclusivamente en factores de riesgo clásicos pero estos factores no explican completamente el riesgo de evento cardiovascular. Por ello, existe un interés clínico en el desarrollo de nuevos biomarcadores que permitan mejorar significativamente la capacidad predictiva de los algoritmos desarrollados hasta la fecha”.
Resultados previos de los investigadores han demostrado el potencial de los niveles circulantes del receptor soluble LRP1 (sLRP1) como indicador mínimamente invasivo de la patología coronaria. “Se trata de un estudio caso-cohorte, explica la investigadora, en el que se analizaron 615 muestras de plasma de una sub-cohorte del estudio Registre Gironí del Cor (REGICOR): 117 sujetos con acontecimiento coronario (angina, infarto de miocardio con o sin síntomas, mortal o no a 10 años) y 498 sujetos sin acontecimiento coronario. Los niveles circulantes de sLRP1 fueron analizados mediante un ELISA comercial”.
Los investigadores observaron un incremento estadísticamente significativo en la concentración circulante de sLRP1 en el grupo de sujetos que sufrieron un acontecimiento coronario en comparación con el grupo control (P <0.001). Los niveles de sLRP1 mostraron una asociación directa con el riesgo de acontecimiento coronario, incluso tras ajustar por los posibles factores de confusión: edad, sexo, TAS, TAD, índice de masa corporal, concentración de HDL-C, concentración de colesterol total y concentración de glucosa (P = 0.025). La inclusión de los niveles de sLRP1 en la función de riesgo cardiovascular REGICOR no supuso un incremento de la capacidad predictiva de este en términos de discriminación o reclasificación.
Por tanto, el sLRP1 es un nuevo biomarcador de riesgo coronario. Sin embargo, los niveles circulantes de este receptor soluble no mejoran la predicción ofrecida por los factores de riesgo clásicos.